Opinión Migración 150719

Bajo Reserva

Ebrard, temporada de huracanes

Desde el piso 22 de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), en la oficina de juntas del canciller Marcelo Ebrard, se apreciaba ayer un día con nubarrones, pero al final no hubo tormenta, ni en el centro de la Ciudad de México, ni en Estados Unidos, en donde iniciaron redadas para capturar y deportar migrantes. Para la SRE sólo hay panorama optimista, aunque hay quienes —en la oposición e incluso en Morena— creen que México debería redefinir su relación con Estados Unidos. Este lunes se conocerá un nuevo reporte que den los cónsules en EU y se verá si se mantiene un buen clima entre ambas naciones o acaba por llegar la temporada de huracanes.

Las apuestas en la Cámara de Diputados

Nos dicen que hoy el subsecretario para América Latina y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Maximiliano Reyes Zúñiga, deberá comparecer ante las comisiones unidas de Asuntos de la Frontera Norte y de la Frontera Sur, para informar a los legisladores sobre las acciones que ha tomado el gobierno federal en la crisis migratoria, y que el mismo presidente de la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo (Morena), ha calificado de ser una política de “tercer país seguro”. Sin embargo, lo que se preguntan algunos es si don Maximiliano asistirá a la comparecencia o cancelará como lo hizo el titular del Instituto Nacional de Migración, Francisco Garduño. Hasta la tarde de ayer las apuestas estaban parejas 50 a 50. ¿Será que, de nuevo, van a desairar a los diputados? (El Universal, Opinión, p. 2)

Trascendió

QUE la titular de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, expuso ante los mandatarios de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán, Oaxaca, QR y Veracruz, la semana pasada, que poner orden en la frontera sur no es opción, sino obligación del Estado.

A su vez, el canciller Marcelo Ebrard dijo que el encuentro permitirá avanzar en la puesta en marcha del Plan de Desarrollo Integral El Salvador-Guatemala-Honduras-México, con la participación no solo de los gobernadores, sino de los secretarios de Defensa, Luis Cresencio Sandoval; Marina, Rafael Ojeda, y de Seguridad, Alfonso Durazo. (Milenio, Opinión, p.2)

Pulso Político / Protestan familias en EU por redadas

En medio de marchas de protestas de miles de familias de migrantes que están ilegalmente en Estados Unidos, la mayoría de ellas de mexicanos y centroamericanos, comenzaron las redadas de ellos en varias ciudades de ese país, en el que mil 807 connacionales, por ahora, están en centros de detención con orden de deportación definitiva, declaró el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard.

Previo al inicio de esa cacería humana, el sábado, una veintena de indocumentados, entre ellos varios mexicanos, fue arrestada en San Diego, con la reiterada amenaza del mandatario estadounidense Donald Trump, de “los sacaremos por miles de nuestro país”, lo que así empezó a ocurrir este domingo. (Francisco Cárdenas Cruz, La Razón, Opinión, p.9)

Teléfono Rojo / La IP paga la contención de migrantes

Los mexicanos pagamos por triple vía la contención migratoria.

Y no nada más por zonas, al sur, a medio país y en el norte de la República para evitar presiones de indocumentados, mayoritariamente centroamericanos, para Donald Trump.

Porque los retenes están abajo, en medio y arriba.

Tratemos de explicar:

En la frontera sur el Gobierno pone la vigilancia: soldados, marinos, agentes de migración y por supuesto los cuerpos de seguridad de esos estados: Chiapas, Tabasco, Oaxaca…

Ahí está la primera parte del gasto a través del erario.

Pero esa erogación, hecha de manera indirecta a través del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), no incluye el buen trato a los miles o tal vez decenas de miles de indocumentados detenidos. (José Ureña, 24 Horas, Opinión, p.3)

Quebradero / Redadas, aquí y allá

Si algo nos debe quedar claro es que Donald Trump no va a cambiar un ápice su mirada sobre los migrantes. Es una constante que ahora en la presidencia se la ha pasado señalando y castigando.

Este fin de semana está tratando con redadas de expulsar de su país a un buen número de migrantes, a quienes en la mayoría de los casos los ve como delincuentes.

Estamos en medio de un escenario de enorme complejidad y con mínima capacidad de maniobra. El Gobierno mexicano ha tratado a como dé lugar de llevar la fiesta en paz y en ello, en muchos casos ha cedido de más. (Javier Solórzano Zinser, La Razón, Opinión, p.2)

Redadas en EU: atrocidad e hipocresía

En diversas ciudades de Estados Unidos se instauró ayer un clima de terror debido al inicio de las redadas de migrantes decididas por el presidente de ese país, Donald Trump, quien pretende expulsar a miles de trabajadores extranjeros.

En Chicago, Los Ángeles, Nueva York, Houston, Miami, Atlanta, San Francisco, Baltimore y Denver, que son las urbes en las que empezó la persecución de migrantes a cargo del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), miles de personas se encuentran en estado de zozobra, imposibilitados de salir de sus casas por temor a ser capturados y adoptando planes de contingencia ante detenciones que se traducen, en muchos casos, en abruptas separaciones familiares. La víspera, en la primera de esas ciudades, miles de inconformes salieron a las calles para manifestarse en contra de la cacería humana anunciada por el gobierno federal. (La Jornada, Editorial, p.2)

El Correo Ilustrado

“Soltar a la migra” no es nada nuevo, opina

La marcha que realizaron miles de personas en Chicago, Estados Unidos, que se manifestaron en contra de la política antinmigrante de Donald Trump, en las mismas oficinas de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), es trascendente para la resistencia laboral de los 11 millones de connacionales indocumentados que trabajan en ciudades estadunidenses.

Si bien la redada masiva que se inició ayer, provocando pánico, terror y angustia, está enmarcada en el contexto electoral donde el mismo Trump incorpora en su campaña de relección el tema migratorio con un marcado sentimiento de odio contra la población indocumentada mexicana y centroamericana, hay que decir que soltar a la migra con arrestos y deportaciones no es nada nuevo. Son memorables las redadas, la deportación de mexicanos entre los años 1929 y 1930 y las de 1945 a 1954.

Posiblemente la “cacería” de 2019 pueda contrarrestarse con la actitud que están teniendo los alcaldes estadunidenses de no seguir las órdenes que tienen los agentes del ICE en realizar los operativos de deportación, o bien, que los consulados mexicanos den protección a los connacionales que están en territorio estadunidense. (La Jornada, Opinión, p.2)

Desde el otro lado / ¿Cumplirá?

Decenas de organizaciones y defensores de los derechos humanos alertaron sobre las intenciones del presidente Trump de incrementar sustancialmente las redadas para capturar y deportar a quienes, se presume, carecen de documentos migratorios. No está claro si esta vez el presidente cumplirá, cambiará de parecer, o si todo es un golpe mediático como en otras ocasiones. Pareciera que la amenaza de las redadas esconde, además, una venganza por su fallido intento de incluir en el censo la pregunta sobre “si se es o no ciudadano de Estados Unidos”. La Suprema Corte le pidió la razón de incluir dicha pregunta en el censo. Trump no la dio y cejó en su intento. Lo evidente es que la pregunta encerraba una forma de intimidación para quienes no son ciudadanos estadunidenses para que se abstuvieran de participar en el censo de cuyos resultados dependen los fondos federales que se otorgan a cada estado, y de la forma en que se adscribe el número de distritos electorales y representantes al Congreso. California, Nueva York, Texas y Florida son los que continúan recibiendo el mayor número de extranjeros y de otras entidades de Estados Unidos, buena parte de ellos latinos y asiáticos, quienes se identifican con el Partido Demócrata. Trump y los republicanos lo saben, y por ello tratan de coartar la posibilidad de que aparezcan en el censo. (Arturo Balderas Rodríguez, La Jornada, Opinión, p.13)

No criminalizar migración

La imagen desgarradora de un padre y su pequeña hija muertos en su intento de cruzar el Río Bravo, los salvadoreños Óscar Alberto Ramírez y Angie Valeria, tal como ocurriera con el niño sirio Aylán Kurdi en la costa turca del Mediterráneo en 2015, ambas escenas recorriendo el mundo, sacude la conciencia nuevamente y nos llama a no criminalizar la migración y privilegiar el enfoque social.

La noticia fue materia principal de debate en ambos congresos federales, de México y de Estados Unidos. El común denominador de las intervenciones en los dos casos fue la más enérgica condena a las políticas que conducen a esos resultados, especialmente el encono alimentado en la nueva administración derechista de un país que debe su fortaleza económica justamente a la contribución de los migrantes.

No perdamos la perspectiva, y nos quedemos en la visión de corto plazo. La migración es un fenómeno universal y atemporal. Ha estado desde el inicio de los tiempos, en la prehistoria y en las distintas etapas de la historia moderna. La pobreza extrema, y la correlativa búsqueda de mejores condiciones de vida, ha sido el resorte principal. El éxodo actual de sur a norte en el continente americano, Centroamérica como expulsor cardinal, no es la excepción. (José Murat, La Jornada, Opinión, p.16)

México SA

Donald Trump, repugnante// Cacería de indocumentados

Con su característica “sutileza”, el salvaje de la Casa Blanca encontró la fórmula para “resolver” el problema migratorio de su país: violencia y terror contra los indocumentados, la manera más inmunda y violatoria de los derechos humanos para aquellos que ingresaron a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades de vida. Despiadado, Donald Trump inició ayer la cacería (“redadas masivas” le llama) a nivel nacional para deportar a todo aquel indocumentado que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) logre detener, sin importar si se trata de menores de edad –acompañados o no– o incluso de personas que llevan años viviendo en Estados Unidos y tienen familia nacida allí, sin otra “alternativa” que la cárcel y la deportación.

Las ciudades estadunidenses con el mayor número de indocumentados se localizan en los estados de California, Illinois, Texas y Florida, pero los operativos del ICE no se limitan a ellos. Según información del Pew Research Center –de cuyo análisis se toman los siguientes pasajes– en 11 ciudades de los estados citados se concentra una buena proporción del total. El crecimiento de la población entre los hispanos de Estados Unidos se ha desacelerado desde la década de 2000. De 2005 a 2010, la población hispana creció anualmente 3.4 por ciento en promedio, pero esta tasa ha disminuido a 2 por ciento desde entonces. Aun así, el crecimiento de la población entre los hispanos continúa superando al de otros grupos. (Carlos Fernández-Vega. La Jornada, Opinión, p.21)

A México le conviene un demócrata

Donald Trump está feliz con el gobierno mexicano. Desde el exitoso chantaje de los aranceles, la estrategia de castigo lopezobradorista contra los migrantes ha capturado a un número récord de centroamericanos, muchos de los cuales han sido deportados de México con una eficiencia que, como ha dicho el propio Trump, ya quisiera Estados Unidos. El resultado ha sido una disminución considerable en la cifra de detenidos cruzando sin documentos en la frontera sur estadounidense, tal y como quería Trump. Ahora, Trump aprovecha cada oportunidad para elogiar la nueva voluntad de colaboración entre los dos gobiernos. No solo eso. Se ha vuelto costumbre escucharlo decir que México hace mucho más que el Partido Demócrata para atender la amenaza de seguridad nacional que, de acuerdo con Trump, representan los migrantes. El hombre se ha salido con la suya y lo sabe. (León Krauze, El Universal, Opinión, p.7)