Opinión Migración 270719

Sexto Día

Infidelidad, ejecutados, asalto a JC ¿y la güera? La ejecución de dos israelíes en Plaza Artz Pedregal tiene varias aristas. Muestra cómo México está lejos de ser un país seguro y con sistemas migratorio, de inteligencia y de seguridad confiables y cómo la capital del país es una ciudad apetitosa, donde los cárteles no sólo nacionales sino internacionales se han instalado y operan. También cómo el país es atractivo para los grupos delincuenciales por su ubicación geográfica: es la puerta hacia Estados Unidos y facilita el tráfico de personas con la impune entrada a México de extranjeros sin control.

La entrada de Benjamín Yeshurun Sutchi y Alón Azulay -dos ocasiones el primero pese a ser criminales consumados y su libre operación confirman que no es lejana la probabilidad de que delincuentes y hasta terroristas de todo el mundo intenten llegar a Estados Unidos a través de suelo azteca. Y entonces, hasta el reclamo de Donald Trump no parece exagerado. Quiere que México selle sus fronteras para evitar la llegada de toda clase de migrantes, principalmente centroamericanos. Basta observar los puestos del Instituto Nacional de Migración (INM) que operan en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y que, a mala imitación de los de Estados Unidos, pide pasaporte y ficha a los visitantes.

Ahora Honduras Andrés Manuel estará hoy en Minatitlán, Veracruz. Donará otros 30 millones de dólares, como a El Salvador. Y lo hará al presidente de Honduras, Orlando Hernández, en el marco de la presentación del programa Sembrando Vida, que busca dar empleo y evitar la emigración. (Alberto Montoya, Ovaciones, p. nal1 nal2)

Tres en Raya // Dos errores de dedo corregidos: Reforma vs Gutiérrez Canet

Leí en Templo Mayor, de Reforma: Por suerte Donald Trump no entiende el español, pues si leyera los textos de Agustín Gutiérrez Canet, seguramente nos pondría más aranceles. Por supuesto es dueño de sus palabras, pero las escribe desde la residencia de la embajadora mexicana en Washington, su esposa Martha Barcena. Y, pues, como que eso no se ve muy diplomático.

No se ha tipificado el delito de portación de marido prohibido. Lo que sí establecen las leyes es el derecho a la libertad de expresión. Un medio como Reforma, que tanto ha luchado por este derecho y que tanto lo ha ejercido -resistiendo embates de gobiernos de diferentes signos ideológicos 110 debería por ningún motivo publicar nada que parezca o sea una invitación a la censura.

Irreprochables tesis de Gutiérrez Canet. Es cierto, Donald Trump no lee español; ojalá le traduzcan el artículo mencionado. Y espero también, Trump tuiteara duramente contra el esposo de la representante de México en EU. Ello, por un lado, pondría a prueba la solidez de los principios de AMLO; a nuestro Presidente le resultaría dificilísimo apoyar la censura a un hombre a quien respeta, aprecia en lo personal y admira como Gutiérrez Canet, no sólo por el cariño que le tenga, sino por lo que representaría en términos de doblegarse -otra vez- al poder externo. (Verónica Malo Guzmán, El Heraldo de México, p. 7)

La desigual distribución de la violencia y el terrorismo

Lo mismo en Siria que en Honduras, Lo mismo en Afganistán que en Sudán o Guatemala. Para esas personas, para esas madres que se ven obligadas a tocar puertas que no se abren, o rogar a guardias nacionales que les permitan el paso, no valen las gráficas o los datos que hablan de los “mejores” tiempos de la humanidad.

Esta desigualdad de paz, entonces, no solo se manifiesta a través de la migración y el refugio, sino a través de una brecha en las conciencias: lo que no vivimos o lo que no nos cuentan nuestros medios o nuestras redes, no existe. Y cuando los 57 atentados de junio y julio desaparecen de nuestro radar o cuando, tras estudiar las grandes tendencias o las gráficas, algunos concluyen que el planeta nunca había experimentado el bienestar y la paz como hoy, es justo el punto en el en que corremos el riesgo de perder la empatía, y asumir que lo que sea que estemos haciendo en el mundo está bien, porque gracias a ello estamos mejor. Eso es lo que dicen los datos, ¿no?

Mirar otro lado de la moneda, en cambio, implica el trago amargo de entender (1) que todos somos parte de un mismo sistema; lo que sucede en México, en Honduras, en Siria o Afganistán, tiene lazos de interconexión que no siempre son tan claros o evidentes pero que ahí están; (2) que la desigual distribución de la violencia y el terrorismo es justamente una parte de la enfermedad ese sistema; (3) que las disrupciones violentas también encuentran frecuentemente canales de salida a través de países considerados tradicionalmente pacíficos; (4) que la falta de interés acerca de esa desigual distribución de la violencia—ya sea porque los grandes medios no la cubren, o porque nos parece lejana, del mismo modo que a otros les parece lejana la violencia que tiene lugar en países como el nuestro—no hace otra cosa que contribuir a perpetuarla; y por tanto (5) que encontrar soluciones integrales y de raíz para resolver los conflictos armados, disminuir el terrorismo o combatir a las redes criminales, operen donde operen, son responsabilidades que compartimos todas las partes de ese sistema descompuesto. (Mauricio Meschoulam, El Universal, p. Nacional 12)

La migración: de problema a solución global

Millones de personas en el mundo están emigrando, esto es, dejan voluntariamente los lugares de origen donde residen para ir a vivir a otra localidad o país. La migración interna se da cuando las personas se mudan dentro de un país, pero cambian de jurisdicción, lo que significa que se llegan a acomodar en otro municipio u otra entidad federativa. Cuando se pasa a residir a otro país se le conoce como migración internacional.

En México la migración interna a gran escala ha sido la constante desde los años cuarenta a la fecha. La industrialización de México provocó una fuerte emigración del campo a las ciudades de México, Guadalajara y Monterrey, la atracción era, como lo sigue siendo hoy, conseguir un empleo y mejorar así sus condiciones de vida. Actualmente, los municipios conurbados a la Ciudad de México y los de las ciudades fronterizas son los que más sobresalen como receptores de migración interna. Otro ejemplo de migración interna la representan los “jornaleros”, donde familias enteras se mudan del sur del país a Jalisco, Sinaloa, Sonora y las Baja Californias, para regresar después de las cosechas a su tierra original. Aunque cada vez más estos trabajadores dejan de regresar.

El número de emigrantes internacionales ha ido en aumento, aunque creciendo a tasas descendentes. El Banco Mundial estima que en 2018 hubo 240 millones de migrantes económicos, de los cuales más de 164 millones fueron trabajadores migrantes, que incluyen a 68 millones de mujeres. Estas cifras no incluyen la migración de personas indocumentadas, como tampoco a los refugiados o asilados. (Jorge A. Chávez Presa, El Universal, p. Nacional 13)

Más violaciones a los derechos de migrantes y refugiados

En mi artículo anterior (https://bit.ly/2LJb4lg), hago un recuento de diversas normas de tratados de los que México es parte, que el Estado mexicano está violando.

El 4 de junio pasado, el Juzgado Primero de Distrito en materia de Amparo en Baja California, emitió sentencia, en el que resolvió, entre otras cosas, que ninguna autoridad, ya sea municipal, estatal o federal distinta al Instituto Nacional de Migración (INM), pueda realizar revisión, control o verificación migratorios. Además, aclaró que la Ley de Migración establece que esas labores son exclusivas del INM y son indelegables. (Datos obtenidos de https://bit.ly/2Mec7tb)

La resolución mencionada se refiere a hechos ocurridos en 2018, pero la resolución es posterior a la entrada en vigor de la Ley de la Guardia Nacional, (28 de mayo de 2019). La resolución contundentemente dice que ninguna autoridad que no sea el INM, puede hacer control o verificación migratorio y aunque no lo diga expresamente, eso incluye a la Guardia Nacional (GN). (Santiago Corcuera, El Universal, p. Nacional 13)

Contraluz //  Imperativo, someter a Trump

Se vio conmovedor el presidente de Guatemala, Jimmy Morales, tramitando un recurso constitucional para darle la vuelta a un amparo que le impedía convertir a su país si no en campo de concentración, sí en traspatio de Estados Unidos. Idéntica impresión han causado nuestro Jefe de Estado y otros mandatarios impelidos, mediante amenazas y chantajes, a apechugar con las exigencias comerciales y migratorias del despreciable gringo.

En el caso de México, la condescendencia y los esfuerzos para atender la exigencia de frenar, a como dé lugar, el flujo de indocumentados, o resignarse a malograr el T-MEC, han servido lo mismo que un sombrero en una tormenta. Es doloroso, pero cierto: Apergollado por Trump, el gobierno de la 4T configura, junto con el gobierno estadunidense, una de las mayores crisis humanitarias en la historia de nuestra región, con migrantes acosados y agredidos por el norte y por el sur.

Apenas horas después de reunirse con Marcelo Ebrard y de reconocer con hipocresía los resultados de nuestra política migratoria —30 por ciento menos migrantes hacia Estados Unidos—, Mike Pompeo subió la vara hasta un nivel imposible de saltar. En declaraciones a la televisora favorita del trumpismo, el canciller estadunidense celebró los resultados de la implacable persecución de la GN a los indocumentados; pero, dijo, aún falta por hacer. Porque éste es asunto de seguridad nacional para su país y el objetivo, “cero detenciones de migrantes”.

En declaraciones a la televisora favorita del trumpismo, el canciller estadunidense celebró los resultados de la implacable persecución de la GN a los indocumentados; pero, dijo, aún falta por hacer. Porque éste es asunto de seguridad nacional para su país y el objetivo, “cero detenciones de migrantes”. En su encuentro, este sábado, con el hondureño Juan Orlando Hernández, Andrés Manuel López Obrador deberá tener en cuenta esta meta inalcanzable. (Aurelio Ramos Méndez, La Crónica de Hoy, Op, 1)

Comparecencias y aranceles

Nadie sabe cómo resolverán los demócratas ese par de dilemas o si serán capaces de resolver uno o ambos y en ello radica la preocupante fortaleza de Trump que esta misma semana volvió a usar la amenaza de la imposición de aranceles contra Guatemala por negarse a convertirse en tercer país seguro.

Esa condición impone condiciones severas, pues implica que el país que la acepta debe recibir a cualquier solicitante de asilo que llegue a su territorio, aunque esa persona desee en realidad llegar a EU. Canadá fue forzada a aceptarla en 2002 como parte de un acuerdo bilateral que todavía hoy despierta todo tipo de críticas y México sigue enfrentando fuertes presiones para asumir esa condición, como lo demuestra el ahora constante asedio de efectivos del Ejército, la Marina y la recién creada Guardia Nacional contra albergues para migrantes y que motivó una inusual crítica de la conferencia de obispos de México al gobierno federal.

EU ha regresado a las épocas de la política del gran garrote, valiéndose para ello del uso de los aranceles, sin percibir los efectos negativos de actuar así, especialmente para asuntos como el combate al terrorismo en los que EU requiere de colaboración. Dado el resultado anticlimático de la comparecencia de Mueller, no queda más que esperar a que los demócratas se pongan de acuerdo consigo mismos, tanto en el tema de quién será su candidato presidencial como en el de si van o no a iniciar el procedimiento para el desafuero y ver si esta pesadilla puede durar sólo un año y medio más o si deberemos padecer esta realidad otros cinco y medio años. (Manuel Gómez Granados, Excélsior, p. Nal 8)

El insulto favorito

En un país creado por inmigrantes, como Estados Unidos, el peor insulto es hacerte sentir que no perteneces a este lugar y que no eres bienvenido. Ese rechazo lo han sufrido todas las nuevas olas de recién llegados y todos los grupos minoritarios. En el 2017 había más de 44 millones de extranjeros viviendo en Estados Unidos, según el Pew Research Center. Y no me queda la menor duda que muchos de ellos han tenido que enfrentarse a una buena dosis de discriminación.

El 25 de agosto del 2015 fui a Dubuque, Iowa, a una conferencia de prensa del entonces candidato presidencial Donald Trump. Cuando le intenté hacer una pregunta sobre inmigración, Trump dijo que no me había dado la palabra y luego: “Go back to Univision” (Regrésate a Univisión). Trump sabía perfectamente para quién trabajaba y no me quería ahí. Y recurrió al mismo lenguaje de los racistas.

Lo más interesante, sin embargo, ocurrió después. Luego de que su guardaespaldas me sacara del salón de la conferencia de prensa, uno de sus seguidores me apuntó con un dedo y me dijo: Get out of my country (Lárgate de mi país). Solo segundos después de que su líder me había atacado, él se sintió envalentonado para decir algo similar. El odio es contagioso.

Estos ataques verbales a mí y a las congresistas forman parte de una larga lista de expresiones racistas de Trump. Durante años sugirió que Barack Obama no había nacido en Estados Unidos, lanzó su campaña presidencial diciendo que los inmigrantes mexicanos eran criminales y “violadores”, alguna vez se refirió a Haití y a naciones africanas como “países de m..rda”, y en una entrevista con CNN aseguró que el juez Gonzalo Curiel no podía realizar bien su trabajo debido a su origen mexicano. (Jorge Ramos Ávalos, Reforma, p.8)

Desarrollo rural vs migrar

La migración irregular es un tema que está al más alto nivel en la agenda política del mundo. México y los países del Norte de Centroamérica (El Salvador, Guatemala y Honduras) enfrentan esta crisis con particular fuerza. La mitad de los migrantes del Norte de Centroamérica son de origen rural.

La crisis migratoria ha hecho recordar a las autoridades y a las sociedades que en el Corredor Seco desde hace décadas subsisten territorios en condiciones inaceptables de marginación social. Los habitantes de estos territorios abandonados de repente se hacen ver y oír, a través de fenómenos sociales como esta ola migratoria.

Tienen razón los presidentes de México, Guatemala y Honduras y el vicepresidente de El Salvador, cuando en su declaración política del pasado 1 de diciembre señalaron que había que proponerse un plan de desarrollo integral orientado a resolver las causas estructurales de la migración. La solución de fondo a la migración forzada por la desesperanza es el desarrollo; y, en el caso de la mitad de los migrantes, es el desarrollo rural.

Sabemos cómo promover ese desarrollo rural que erradique el hambre, que genere oportunidades económicas, y que incremente la resiliencia de la agricultura y de las sociedades rurales ante el cambio climático. Las soluciones técnicas están disponibles y sabemos cuáles son las que mejor funcionan. ¿Qué hace falta?

Lo primero y lo más importante es la voluntad política de los gobernantes, al máximo nivel y sostenida en el tiempo. La citada declaración política de los gobernantes de El Salvador, Guatemala, Honduras y México es un excelente punto de partida. (José Graziano da Silva y Julio Berdegué, Reforma, p. 9)

Rayuela

Mafias coreanas, rusas, chinas, italianas y ahora israelíes. ¿Nos convertiremos en las Naciones Unidas del crimen? (La Jornada, Contraportada)

El Correo ilustrado // Aclaración de Sedena a nota sobre Casa del Migrante Saltillo

En relación con la nota titulada “…Militares irrumpen frente a albergue de Saltillo y revisan a indocumentados…”, de Leopoldo Ramos, publicada el 24 de julio en el medio de comunicación que atinadamente usted dirige, en la que refiere que el 23 de julio soldados y policías municipales se instalaron en el acceso de la Casa del Migrante de Saltillo para pedir documentación a quienes entraban y salían; esta dirección general de Comunicación Social, aclara lo siguiente:

Personal de Seguridad Pública integrante de una Base de Operaciones Mixta, de conformidad con las funciones que le competen, en inmediaciones de la Casa del Migrante de Saltillo efectuó una revisión a una persona que había huido al notar la presencia policiaca, sin encontrarle nada ilegal permitiéndole continuar con su camino; cabe destacar que dicha acción se realizó con apoyo de la Guardia Nacional y militares y en ningún momento el personal militar se instaló en el acceso del albergue para pedir documentación a quienes entraban y salían, como lo señala en la nota.

Coronel de Infantería DEM, director general de Comunicación Social de la Sedena. Francisco Antonio Enrique Rojas

Respuesta del corresponsal

Con relación a la carta aclaratoria de la Secretaría de la Defensa Nacional, apunto lo siguiente:

1) El texto se acompañó de fotografías y un video donde es evidente que elementos y unidades de la Policía Militar y de la Policía Preventiva de Saltillo se instalaron frente al acceso de la Casa del Migrante Frontera con justicia, de la colonia Landín. Las imágenes son de militares desplegados en la calle y en torno al portón del inmueble.

2) Quien advirtió que el personal de la Sedena y de la Dirección de Seguridad Pública Municipal pretendieron revisar la documentación migratoria de sus huéspedes fue el director de la Casa del Migrante, Alberto Xicoténcatl Carrasco.

Leopoldo Ramos, corresponsal en Coahuila. (La Jornada, Editorial, p.2)